Anclada desde 1955 en la colonia Tabacalera, Discópolis es un localito familiar que profesa el amor no solo por los miles de vinilos que resguarda en su interior, sino también por la acumulación de diversos objetos que registran el paso del tiempo en esta ciudad. Detrás de las antigüedades, sin embargo, también hay una historia personal. El fundador de Discópolis, Guillermo Aguilar, junto con su hermano Luis, encontró en los discos una forma de distraerse, de olvidar que su padre los había abandonado, que su hermana acababa de morir y que su madre no tenía mucho dinero para darles.

Quien cuenta esta historia es Jorge Guillermo Aguilar, hijo de Guillermo y dueño actual de Discópolis. Pero no solo cuenta cómo la tienda ha encontrado su camino dentro de la CDMX. La tienda también es un testimonio de los andares de su familia, de su padre y de su tío en la colonia Tabacalera. Lo que relata es una leyenda que se puede ver y tocar.

Un tesoro de vinilos clásicos en la colonia Tabacalera

Una tienda con ánimo de mausoleo

Guillermo y Luis eran melómanos nerds. Con solo quince años, produjeron y realizaron la selección musical de un programa de la radio de aquella época. El lote original de vinilos de los hermanos Aguilar se exhibe en las paredes, de donde también cuelgan fotografías de su madre en blanco y negro. Cada objeto en sus vitrinas es un fragmento de lo que fueron y lo que siguen siendo hoy.

Cuando uno entra a Discópolis se encuentra con una decoración inusual para una tienda de vinilos. Además de las cajas y cajas llenas de fundas de plástico para los discos, hay posters enmarcados de José José; de la película de Kubrick, 2001: A Space Odyssey; un par de viejas computadoras que recuerdan a la era preinternet móvil; un saxofón colgado justo en medio del salón, como si el jazz fuera el inicio de todo; libros como el Atlas enciclopédico de aviones civiles, una antología de los Beatles, un ejemplar de Gotta Sing Gotta Dance: A Pictorial History of Film Musicals o la guía 1000 Record Covers, de Michael Ochs. Sorprende saber que casi todo está a la venta.

Su acervo discográfico es intimidante. Discópolis se compone de casi 150 mil vinilos de géneros como rock, metal, pop e incluso indie. Desde los Crazy Boys hasta Lana del Rey; desde los primeros años de Luis Miguel hasta los últimos de Taylor Swift. Tampoco se olvidan rarezas como la narración completa en español de La Guerra de las Galaxias, con la música y efectos originales de la película, o la hermosa serie de discos ilustrados del sello Vogue, de los años 40. No todo está a la vista ni es fácil de encontrar. De hecho, ni siquiera la tienda misma contiene todo su catálogo.

Explora la historia musical en vinilos en la colonia Tabacalera

Una totalizante colección de vinilos en la colonia Tabacalera

“Nunca hubo un inventario, tuvimos que empezar desde cero cuando Guillermo falleció [hace seis años]”, confiesa Dinorah, esposa de Jorge. Así, la labor de clasificación de vinilos parece inagotable. Dan ganas de pasar horas empolvándose las manos con tal de encontrar algún tesoro oculto. Aunque la mayoría de los discos se encuentran en esta tienda de la Tabacalera, también hay una bodega en Coyoacán que Jorge y Dinorah visitan de vez en cuando, especialmente si algún coleccionista les pide un título en específico que por alguna razón no han mudado a la tienda.

Los hermanos Aguilar también amaban el beisbol. Por eso, la tienda cuenta con un rincón de parafernalia beisbolera. Ahí hay varias pelotitas maltratadas de tanto uso, fotografías con Jorge Pasquel (“el Carlos Slim de los años 50”), quien trajo a las canchas nacionales a diversos beisbolistas extranjeros, sobre todo de Cuba cuando estos no eran aceptados por Estados Unidos. También hay pedazos de tela con el logo y nombre de múltiples equipos, como los Cleveland Indians (hoy conocidos como Cleveland Guardians) o el Águila de Veracruz.

Discópolis: un destino de vinilos en la colonia Tabacalera

Este local es, sobre todo, un universo de objetos en apariencia insignificantes pero llenos de significado. Juguetes de Star Wars o de Coca-Cola, antiguas máquinas de escribir, iPods de primera generación, teteras de cerámica, posters de México 68 o pelotas de futbol. Todas las piezas cuentan historias de la ciudad, la colonia y de una familia unida por el amor a la música. “Lo que ves aquí son highlights de la vida de mi papá”, cuenta Jorge Guillermo acerca de una de las repisas que adornan Discópolis. Una tienda con espíritu de gabinete de curiosidades.

Aunque los aficionados a los vinilos serán las primeras personas en interesarse por este lugar, Discópolis es de interés general. Cualquier habitante de la ciudad puede venir pasar unas buenas horas hurgando en sus repisas y cajas en busca de relatos desconocidos de una metrópolis oculta en discos y objetos.

@discopolismx 
Insurgentes Centro 72-E, Tabacalera
Sábados y domingos | 10:45 am – 5:45 pm