¿Música clásica? Ugh. Esta reacción tan común se debe a que las orquestas tradicionales se han encargado de asociarla con sofisticación, conocimientos elevados y dinero. La Sinfónica de Minería inaugura una nueva era con la intención de que sea diferente: han eliminado “música clásica”, “buena música”, “música culta” o cualquier término elitista  y anacrónico de sus comunicaciones. Lo suyo es crear música de excelencia, sin importar su procedencia, y que sus conciertos alcancen todo tipo de audiencias.  

Si la Ciudad de México se ha convertido en esta fascinante e inagotable capital mundial es en gran parte gracias a sus proyectos locales. Ya en enero hemos recorrido los 50 años de la Cineteca Nacional en imágenes, descubierto un proyecto de arte y galería en La Merced de nombre Islera, reseñado un partido del equipo mexiano que juega en la NBA G-League desde Azcapotzalco con un ajolote como mascota y probado los deliciosos cafés para otakus de Fuzz Brew en la San Rafael. 

En este entorno de transformación imparable comprometida con el respeto hacia la otredad, en la Ciudad de México no podría faltar una orquesta sinfónica que se aparte del choro elitista y abra música de excelencia hacia todes. Esto hace todo el sentido, ya que la Academia de Música del Palacio de Minería es una asociación civil, sin fines de lucro, creada por universitarios. La Facultad de Ingeniería de la UNAM rescató la tradición de los mineros del siglo XIX y dio vida a la Academia de Música del Palacio de Minería, que nace en 1978 con el propósito de ofrecer música sinfónica de primer nivel en el ambiente universitario. A partir de ese año, se realizan cada verano temporadas de conciertos sinfónicos que han tenido como sede el propio Palacio de Minería, el Anfiteatro Bolívar y la Sala de Conciertos Nezahualcóyotl.

Estas son algunas razones para ir a unos de sus conciertos:

1. En verdad son excelentes: tienen cinco nominaciones al Grammy

Es una agrupación de versatilidad desconcertante. Por un lado, han ofrecido conciertos con Pepe Aguilar, Ximena Sariñana o el Mariachi Vargas de Tecalitlán. Por el otro, han sido nominados ¡cinco veces al Grammy! en categorías relacionadas con la música clásica (la Academia siga utilizando este término ¯\_(ツ)_/¯)  y obtenido uno por la grabación que hicieron del Concierto venezolano de Paquito D´Rivera. 

Son la primera orquesta mexicana en grabar con la legendaria disquera Deutsche Grammophon. Y su reciente gira por Estados Unidos provocó críticas elogiosas por parte de la prensa especializada. Por ejemplo, la del musicólogo Jack Moeser, donde agradece haber escuchado repertorio que las sinfónicas de Nueva York, Chicago o LA jamás tocan (y si llegan a tocarlo, no lo hacen tan bien). 

¿A qué repertorio se refiere? Sobre todo mexicano: La noche de los mayas de Silvestre Revueltas, Suite voltaje de Gabriela Ortiz, Danzón núm. 2 de Arturo Márquez y Sinfonía india de Carlos Chávez, acompañados de dos mujeres solistas latinas: Gabriela Monterio (pianista) y Gabriela Jiménez (percusionista). 

2. Realizan una profunda labor comunitaria 

Este profundo respeto por sus orígenes forma parte de los mismos estatutos de Minería, donde literalmente existe la obligación de comisionar obra nueva cada temporada a una persona compositora mexicana. Si tomamos en cuenta que la orquesta se fundó en 1978, estamos hablando de que la Sinfónica de Minería ha comisionado por lo menos 45 obras musicales a artistas como Ana Lara, Marcela Rodríguez, Hilda Paredes, Mario Lavista, Federico Ibarra o Javier Álvarez; es decir: han financiado una buena parte de las obras maestras de la música mexicana sinfónica del último medio siglo.  

Al ser una asociación civil sin fines de lucro, sus ganancias no enriquecen empresarios, sino que se destinan a labor comunitaria. Casi todas las personas solistas que contratan, de la talla de Philippe Quint, Pacho Flores o Joshua Bell, deben ofrecer de forma gratuita clases de especialización a estudiantes. Y recientemente interpretaron Carmina Burana de Carl Orff en un lleno absoluto en la Sala Nezahualcóyotl para destinar todo el dinero reunido a la reconstrucción de casas destruidas en Acapulco por el huracán Otis. 

3. Es la orquesta que toca cuando nadie toca 

Todas las orquestas del mundo descansan en verano, menos la Sinfónica de Minería. Por lo tanto es una agrupación que funciona como la selección nacional de futbol: se integra por las mejores personas intérpretes de todas las orquestas profesionales de México y varios países del mundo (naturalizadas rusas, estadounidenses y venezolanas incluidas).

A nivel sonido, tiene acceso a los más destacados intérpretes. ¿Y quién los dirige? Carlos Miguel Prieto, único mexicano que ha sido nombrado “director del año” por la revista Musical AmericaPero además de su tradicional Temporada de verano, la Sinfónica de Minería ofrece conciertos durante todo el año en diversas sedes de la Ciudad de México. 

4. Está dispuesta a renovarse

¿Qué significa una nueva era para una orquesta con más de 45 años? En el caso de Minería, de acuerdo a su propia comunicación, “abrazar valores inherentes a las nuevas generaciones, como tolerancia, empatía, inclusión y respeto”. Es decir: renovarse. Dejar atrás cualquier atisbo anacrónico y elitista y llevar “música de excelencia” (así, sin género ni epítetos: desde las nueve sinfonías de Beethoven hasta orquestaciones de la música de Iron Maiden). 

La Sinfónica de Minería presentará su nueva era de manera oficial este lunes 22 de enero en la Sala Nezahualcóyotl a las 20 h. con un concierto cuyo programa “está integrado por obras que representan tres de los ejes fundacionales de nuestro proyecto que continúan vigentes: 

  1. Clara de Gabriela Ortiz como reafirmación de nuestro compromiso por comisionar y estrenar de manera permanente música escrita por personas mexicanas. 
  2. La suite orquestal del ballet El amor brujo de Manuel de Falla como reafirmación de nuestro compromiso con interpretar obras monumentales (en cuestión de dimensión orquestal) y de alta exigencia técnica que son infrecuentes en la programación de las orquestas mexicanas. 
  3. La Sinfonía núm, 3, Heroica, de Beethoven como reafirmación de nuestro compromiso de interpretar los grandes hitos de la historia de la música desde un sonido de excelencia”.

Si te interesa asistir a sus conciertos puedes consultar la cartelera en su sitio. La temporada empieza en verano pero tienes conciertos en distintas sedes durante todo el año.