El tenis de mesa o ping pong es un deporte bastante antiguo. Fue inventado en Inglaterra, en los dormitorios universitarios, como un juego entre amigos y con equipo improvisado:​​ tapas de madera, corchos de botellas y una mesa dividida por libros. Eventualmente el juego se popularizó y se extendió a muchos más países y en 1988 se convirtió en deporte olímpico. Un poco como la historia del ping pong, que surgió de la casualidad, es la de uno de los clubs que existen actualmente en la CDMX. 

Piong Club comenzó como una reunión entre amigos, se juntaban en casa de Fernando Torres, él cocinaba, alguien más ponía música y todos jugaban ping pong. Después de algunas cuantas reuniones ya no sólo asistían sus amigos cercanos pues se empezó a correr la voz sobre estas reuniones de ping pong, por ello decidió crear un espacio donde entusiastas del ping pong, la música y la gastronomía pudieran encontrarse. 

Cuando Piong Club creció, el patio de Feroto quedó pequeño, por lo que fue necesario encontrar un nuevo lugar para jugar, fue así que llegaron a Central de maquetas, uno de los lugares más icónicos de Tlatelolco. Desde Eje Central se puede ver el emblemático letrero amarillo con letras negras que enmarcan este pequeño local en la torre 5 de febrero en la segunda sección de Tlatelolco. Desde su apertura en 1965, este espacio se convirtió en la tienda donde todos iban a comprar el material necesario para construir maquetas: animales miniatura, plantas sintéticas, hojas de texturas y muebles en todas las escalas. A partir de 2019 el local ya no funciona como tienda pero ha albergado diferentes exposiciones de arte.

Piong club se reúne el último fin de semana de cada mes. Este club de ping pong no es sólo para expertos, sino para todos aquellos que quieran pasar una tarde con amigos, con comida rica y música, por lo que, si crees que no sabes lo suficiente sobre el tenis de mesa no te preocupes, este es un espacio en donde puedes practicar tus habilidades y disfrutar del ping pong sin muchas pretensiones. Para participar en el torneo debes escribirles a través de su cuenta de Instagram y llegar puntual a la cita para registrarte, que tomen tu foto para el torneo y organizar las partidas. En cada edición hay un pequeño trofeo para el ganador, además de que no pagas nada. 

La comida es una parte importante de Piong Club, por lo que el menú cambia mes con mes, nosotros fuimos a la edición de julio y pudimos probar hots dogs —muy ricos—, pero se trata de menús muy variados, pues en otras ocasiones han preparado ceviche, hamburguesas, alitas y hasta barbacoa. También tienen pasteles y postres de Farmacia Internacional. Así que la comida no es un problema si quieres pasar toda la tarde jugando. 

Pudimos platicar con Feroto y nos comentó que su intención al crear  Piong Club fue hacer algo más que un club, su objetivo es construir un espacio en donde, a través del juego,la música y la comida, las personas se sientan parte de una comunidad— Piong club— y vivan una experiencia memorable. En Piong club las y los asistentes pueden disfrutar de la competencia amistosa, escuchan música especialmente seleccionada por el DJ del mes y prueban sabores especiales en cada ocasión.