Aunque el pastel de calabaza es una tradición norteamericana, es también la llegada oficial del otoño (o la idea del otoño) en la ciudad. A las especies con que se prepara –canela, gengibre, clavo, nuez moscada, cardamomo y vainilla– se les llama “especies de invierno” porque calientan el cuerpo. Comerse un pastel de calabaza en otoño es autoindulgencia y apapacho puro.

Ya que terminó la temporada de pan de muerto (y necesitamos nuestro dulce de temporada) recomendamos estos tres pasteles para sobrevivir los días venideros.

1. El pecan&pumpkin pay de Belmondo Roma

pasteles de calabaza

De los tres este es nuestro favorito porque es una mezcla de pay de nuez y calabaza. Lo recomendamos para desayunar porque es cotizado. Se acaba temprano así que recomendamos pasar por uno en la mañana. Aprovechen, todavía va a estar un par de semanas más.

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2. La tarta de Bó Pastisserie

pasteles de calabaza

Bó es una diminuta pastelería (con tres sucursales) que hace repostería igual de pequeña. Desde hace años su tarta de higo tiene encantados a cientos en la ciudad. Por ello había que probar la tarta de esta temporada que recomendamos para el antojo. Estará hasta principios de diciembre, no se la pierdan.

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3. Ocho de calabaza en Panadería Rosetta

pasteles de calabaza

A su estilo, siempre delicioso, Elena Reygadas creó esta versión del clásico pastel de calabaza: el ocho de calabaza. Vayan a probarlo en fin de semana a cualquiera de las panaderías de Rosetta (Colonia Roma y Juárez), entre semana no lo hacen. Se termina a principios de diciembre así que aprovechen antes de que pase un año para probarlo.

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