La escuela ideal del colectivo Hojarasca
Visitamos el taller de este colectivo multidisciplinario del sur de la CDMX y encontramos a un grupo libre, solidario y con una marcada inclinación social.
Visitamos el taller de este colectivo multidisciplinario del sur de la CDMX y encontramos a un grupo libre, solidario y con una marcada inclinación social.
Porque el verano se va como arena entre los dedos, te dejamos algunas recomendaciones para vivir esta ciudad de fiestas y comidas, de bailes y pasteles, de arte y melodías.
La Tarjeta de Crédito Marriott Bonvoy Banorte es más que una tarjeta común: es tu pasaporte a nuevas experiencias, recuerdos imborrables y un aliado para hacer realidad tus sueños.
En la ciudad hay un edificio que nos recuerda que México tuvo su propio papa. Así como lo lees: hubo un Papa mexicano. Esta es la historia.
El 15 de julio de 1951 se vivió uno de los episodios más dramáticos en la historia de las inundaciones de la Ciudad de México.
Hoy, viernes 12 de julio, celebramos a San Juan Gualberto, patrón de los parques y la silvicultura, o sea, el cultivo de los bosques. También es día de planear el finde: hay feria de fanzines, expo de cerámica, cine de David Lynch, ambient para leer y bastante, bastantito más.
Quizá no lo conozcas pero seguro lo has probado. Descubre la historia del tequesquite, un ingrediente esencial en la cocina mexicana.
Todos sabemos qué pasó aquí, pero aparte de ese episodio funesto, El Charco de las Ranas es un clásico restaurante en El Pedregal.
Estamos a 5 de julio y, cantaba César Vallejo, “llueve más de abajo ay para arriba”. Por suerte, hay más por hacer que por llorar en la ciudad de los suspiros. Estas son nuestras catorce recomendaciones para la semana.
El restaurante Nicos, un clásico de la CDMX, colabora con Il Vecchio y Huerto Tlatelolco para balancear frescura y sostenibilidad.
En un cruce en la Santa María la Ribera, entre varios puestos de lámina, se encuentra Pausita, un lugar ideal para el café y la charla.
Si el calor no nos detuvo, las lluvias menos. Esta ciudad es nuestra y saldremos a vivir, beber y marchar —aunque nos mojemos—.