RGB Archive es el universo íntimo y expansivo de Rebeca Garrido, donde cada prenda guarda una memoria y cada intervención textil es una declaración silenciosa contra el olvido. En lugar de seguir las urgencias de la moda, ella cose al ritmo de la emoción, hilando archivos personales, lencería antigua, historias heredadas y gestos poéticos. Esta entrevista es una inmersión en su forma de ver el upcycling no como una tendencia, sino como un acto de resistencia amorosa. Aquí, la ropa no es solo ropa: es materia sensible que se reescribe una y otra vez.
RGB Archive no solo recupera ropa, recupera tiempo. ¿Qué te interesa de esa fricción entre lo que fue y lo que puede volver a ser?
Me interesa esa fricción porque justo ahí está el core de porque empezó RGB.Entre el pasado y el presente es donde encuentro sentido, sentimiento, proceso y catarsis. Lo que fue, se desgastó y se olvidó puede transformarse en algo nuevo si lo miro con otros ojos y le dedicó amor y tiempo.
¿Qué es lo primero que te hace quedarte con una prenda? ¿Es la textura, el corte, el aura, la historia que imaginas?
Casi siempre es la textura o algún detalle que quiera rescatar. Tengo una conexión muy táctil con los materiales, algunos simplemente me dan mas curiosidad por explorar, aunque si se la historia específica de las prendas me parece que el resultado es mucho más especial porque tengo más inspiración y elementos de donde partir para crear.
Tus intervenciones parecen más poéticas que utilitarias. ¿Qué papel juega el gesto artístico y tus emociones en tu forma de hacer upcycling?
Para mí, el acto de coser es un proceso muy emocional, lineal y que me conecta con pensamientos y emociones que muchas veces están escondidos.Me gusta reparar para que la prenda tenga una segunda vida vida o función pero también transformar desde lo afectivo.
Me gusta pensar que upcyclear es un diálogo entre la prenda y sentimientos en mi cabeza, donde yo soy solo el medio para llegar a el resultado final. Incluso si es algo para algún cliente, me gusta conectar con ellos por medio de preguntas y que ese proceso continúe siendo lo más genuino posible.
“Trabajar con lo que ya existe me permite reconectar con ese flow más lento y más consciente, intento mucho resistir la urgencia para enfocarme en los detalles, en el cuidado, en lo que se transforma despacio y con sentido.”
En un mundo donde todo urge, tú apuestas por lo que ya existe. ¿Es una posición política, emocional, estética… o todo eso junto?
Es una mezcla de todo eso, es político porque va en contra del consumo rápido, es emocional porque el proceso habla de cómo transformar sentimientos en objetos tangibles y es estético porque no hay nada más bello que encontrar y dar significado en lo que parecía perdido cuando se decide verlo con otros ojos.
Mi opinión personal es que la inmediatez nos ha hecho perder de vista lo más bello y simple: los procesos, lo hecho a mano, lo que toma tiempo. Trabajar con lo que ya existe me permite reconectar con ese flow más lento y más consciente, intento mucho resistir la urgencia para enfocarme en los detalles, en el cuidado, en lo que se transforma despacio y con sentido.
¿Cómo ha cambiado tu relación con la moda desde que empezaste Wild Heart y RGB Archive? ¿Qué cosas ya no puedes ver igual?
Cambió todo. Ahora no puedo ver la moda sin pensar en lo ético, los procesos, la conciencia y falta de ella, no puedo ver una prenda sin pensar en su origen, en quién la hizo, qué materiales tiene y sobre todo cual es mi y nuestra relación con el consumo de moda.
¿Hay alguna prenda que no hayas querido soltar, que hayas transformado y terminado quedándotela? ¿Por qué?
Voy a confesar que soy una acumuladora pero solo con Rgb!! pero más allá de una sola prenda, lo que nunca he soltado es el archivo con el que empecé. De ahí viene el nombre RGB.Archive: porque es un archivo vivo, íntimo, que va creciendo y transformándose conmigo. Guardo piezas con textiles antiguos, prendas de mi familia y fragmentos emocionales. Algunas las intervengo una y otra vez, otras las conservo porque todavía no estoy lista para soltarlas, me gusta pensar que tengo racks y un Closet lleno de sentimientos que ahora son tangibles.Cada una representa un momento o una era mía son como capas de mi propia historia, y trabajar con ellas me permite seguir dialogando con el pasado mientras se sigue transformando una y otra vez.
Este archivo no solo es la base de RGB, sino pequeñas partes mías con la que también otros creativos pueden experimentar, inspirarse, crear y usar para sus propios universos.
¿Te interesa que las piezas cuentan algo personal tuyo o buscas que cada quien les dé su propia historia?
Hay piezas que salen desde algo muy mío, muy íntimo y al inicio eso era lo más importante hasta que descubrí que me llena y emociona mucho cuando alguien se identifica con mi lenguaje, adopta las prendas y las hace suyas pero a través de su historia y creatividad. Me gusta pensar que cada prenda puede tener múltiples capas de significado y que todo depende de quién las lleve.
¿Cómo piensas el cuerpo cuando estás trabajando con una prenda intervenida? ¿Diseñas para un cuerpo específico, simbólico, múltiple…?
Pienso en un cuerpo tan solo como una forma y que es libre y cambiante. Me interesa que la prenda se adapte, que acompañe al cuerpo en lugar de imponer algo. Muchas veces las intervenciones permiten ese movimiento, exploración y creatividad sobre el cuerpo.
¿Qué materiales disfrutas más trabajar y cuáles se te resisten? ¿Hay alguno que siempre regresa?
Disfruto muchísimo trabajar con lencería antigua, encajes, cualquier tela usada en sastrería y dead stock en general o materiales que ya tienen una historia. Pero intento no tener mucha opinión sobre los textiles si me gustan y no los sé controlar es lindo y es un proceso porque es otro tipo de exploración y más aprendizaje.
¿Qué significa para ti hacer archivo desde la ropa? ¿Te interesa construir memoria o reescribirla?
Ambas cosas, construir memoria y también reescribirla. Es una forma de cuidar, de observar lo que otros tal vez ya no ven. Pero también es una forma de tomar esas memorias y transformarlas. Es reconocer que cada prenda guarda una historia, una textura, una costura, una mancha, una transformación que habla del cuerpo que la uso y del tiempo que la desgasto. En lugar de desechar, pongo atención, reparo con intención y resignificó con emoción.