Pareciera que no hay manera de concentrarse con todo lo que está pasando. Hay cascadas de información, las llamadas virtuales son infinitas y una tras otra. Y el tiempo pasa lento pero rápido. Se perdió completamente la noción de los días, de las horas y de las fechas. Estuve pensando qué hacer para tener unos ratitos de tranquilidad cada día. Empecé por los IG live de diferentes rutinas y me escribió una de mis maestras que iba a dar un retiro de yoga durante la contingencia. Quince días de practicar yoga, meditación y charlas, a la distancia.

Con Durga Stef había ido ya a un retiro a Puerto Escondido hace muchos años y me encantó. Empecé a pensar que iba a ser muy difícil 15 días de Yoga con todo el trabajo y mis horarios locos en la contingencia. Pero me inscribí. Y realmente me cambió el panorama.

Retiro de Yoga a la distancia

La idea de este “retiro de yoga”, si se le puede llamar así, es simplemente encontrar un momento del día para practicar yoga y meditar. Encontrar ese momento del día todos los días durante 15 días. Aunque parezca fácil, no lo es. Durga da charlas y clases diarias con un enfoque más meditativo y menos concentrado en la complejidad de las posturas. Como es online, puedes ver la clase a cualquier hora, aunque hacerla en vivo es lo que más me gusta.

yoga

El objetivo es ser más consciente y dejar de preocuparse por hacer todo perfecto. Soltar, soltar, disfrutar y atreverse a sentir emociones difíciles para transformarlas. Las meditaciones eran en la mañana y en la noche: 12 minutos cada sesión para agradecer todo lo que tenemos y poner atención al momento presente.

El lado bueno de hacer yoga en casa: nada que probarle a nadie

Las charlas hablaron de cómo mantenerse sano por medio de una buena alimentación, y entender que las crisis pueden ser oportunidades para hacer cambios grandes y necesarios. Y a veces necesitamos que alguien nos los recuerde cada día. Así, durante 15 días estuve practicando yoga dos veces al día sin la presión de hacerlo perfecto, porque al final estás solo en tu sala y no hay nada qué probarle a nadie.

A partir de que terminó el retiro he seguido practicando todos los días. Como si el ritmo del cuerpo ya hubiera adoptado ese hábito. Y me siento bien, agradecida y motivada para seguirle. Pronto Durga va a dar otro retiro, así que lo volveré a tomar.

Todos necesitamos encontrar estos momentos de introspección para darle sentido a lo que estamos viviendo. A cada quien le funcionan cosas distintas, pero el objetivo es mantenerse en paz, aprender a soltar y encontrar lo bueno en estos momentos.

Para enterarte sobre estos retiros con Durga Stef, aquí.