Deborah Castillo (Venezuela/México) ha hecho resurgir el Gran Basamento dentro de una iglesia, no como réplica arqueológica, sino como una instalación de sitio específico que dialoga con el barro, la historia, la voz y la violencia del olvido.
Hace unos dos mil años, el volcán Xitle sepultó buena parte del mundo conocido. Entre la lava quedó enterrada la pirámide circular de Cuicuilco, uno de los centros ceremoniales más antiguos de Mesoamérica. Sin embargo, esa estructura —el Gran Basamento— nunca fue realmente olvidada: sobre ella se construyó, se interpretó, se impuso y se narró.
Deborah Castillo invoca la arquitectura circular de Cuicuilco en una operación inversa a la colonización espiritual: si los conquistadores fundaron templos sobre los demonios de piedra, aquí se hace emerger un santuario prehispánico dentro de una iglesia. El barro sustituye al púlpito, la ruina se vuelve altar.
La instalación convive con el mural Los informantes de Sahagún (1948) de Federico Cantú. Ese mural retrata a los frailes evangelizadores interrogando a los sabios indígenas para armar los relatos del pasado: una recopilación atravesada por la violencia, la censura y la manipulación.
En este escenario se presenta la ópera-performance Discurso para las masas, compuesta e interpretada por Lanza, junto con Castillo. Una obra en forma de oratorio dramático donde más de 60 voces —todas cantadas por Lanza— tejen un coro polifónico con discursos políticos reales de ideologías opuestas. El resultado es una escultura sonora que resuena como eco del presente, sobre la ruina del pasado.
Gran Basamento no es una exposición en sentido convencional: es una invocación. El barro, el papel, la música y la voz actúan como vehículos de una memoria que no está en los libros de historia, sino en las fisuras, en los gestos y en las repeticiones.
Es un acto poético y político que nos recuerda que toda construcción de poder lleva inscrita su futura ruina, y que la memoria —como la lava— puede enterrarlo todo o hacerlo emerger cuando menos lo esperamos.
Gran Basamento estará en sala durante los próximos meses.
Laboratorio Arte Alameda
Calle Dr Mora 7, Centro